PEDAGOGÍA Y PSICOLOGÍA EDUCATIVA
¿Qué es el comportamiento?
El término
comportamiento al emplearse como sinónimo de conducta, muchas veces la usamos
cuando nos queremos referir a la disciplina de alguien. Por ejemplo, podemos
observar que para solicitar un trabajo o entrar a una escuela, se requiere una
de carta de "buena conducta" lo cual implica que la persona sea
disciplinada, respetuosa de las reglas y normas establecidas por la sociedad en
la que se desenvuelve.
Debido a que la palabra conducta
es sinónimo de comportamiento, en este texto, se ha preferido emplear
comportamiento para referirse a lo que una persona hace. Este es el significado
de comportamiento que nos interesa y en el que enfoca esta obra y así, evitar
las confusiones que puede generar el término conducta con el significado
"disciplina".
Procedimientos de reforzamiento
En principio, a todos aquellos que tenemos una misión formativa nos interesa
que nuestros alumnos aprendan lo que les enseñamos. Muchas de las cosas que
hacemos los profesores las hemos aprendido a hacer tipicamente, viendo a otros,
por medio de lecturas, cursos o por una combinación de estos medios. Cualquiera
que sea el medio por el cual el profesor se ha formado, es importante que los
profesores conozcan de manera directa, las formas fundamentales por medio de
las cuales un alumno puede ser efectivamente enseñado.
En primer lugar, debemos
distinguir dos acciones primordiales que los educadores efectuamos. Una de
ellas tiene como objetivo lograr que nuestro alumno aprenda a hacer algo nuevo.
Esta acción genérica la conocemos como formación: aprender las vocales, mezclar
colores básicos, sumar, analizar enunciados, decir los nombres de las capitales
de los estados, identificar las partes de la célula, resolver un sistema de
ecuaciones, nombrar partes de los instrumentos musicales, apreciar obras de
arte, seguir un ritmo y tiempo en poesías corales, etc. Pero la formación
abarca no sólo lo estrictamente académico que se iguala a veces con el
desarrollo intelectual, sino aquellos aspectos que conforman su desarrollo
perceptual y motriz: caminar sobre una línea, tener equilibrio en una barra,
distinguir semejanzas y diferencias por medio de los sentidos, etc. y también
el área del desarrollo emocional y social del alumno: dar los buenos días, ser
positivo socialmente, distinguir los rasgos propios de las distintas emociones,
etc. En otras palabras nos interesa que el alumno aprenda a hacer actividades
cada vez más complejas en diversos campos del desarrollo personal. (Versión
electrónica ofrecida por el Grupo Contextos www.conducta.org)
Procedimientos correctivos
La capacidad del ser humano para aprender es sorprendente.
Desafortunadamente no sólo aprendemos a comportarnos en forma correcta sino que
también aprendemos a responder en forma equivocada o incorrecta. La labor del
profesor no sólo incluye la formación de sus alumnos, sino también la
corrección de los comportamientos que no son adecuados. La mayor parte de esta
labor correctiva se refiere al comportamiento que se conoce en general como
"disciplina" aunque en términos técnicos podemos referirnos a ella
como comportamiento emocional y social ya que casi siempre implica la
infracción de alguna regla o norma establecida por la sociedad o la institución
particular en la que se desenvuelve y muchas veces se implica una reacción de
tipo emocional en el infractor al ser sorprendido o al efectuar tal rompimiento
de regla. Las principales técnicas que se conocen para modificar tal
comportamiento inadecuado tienen un fundamento teórico que es necesario
describir antes de pasar a su especificación.
Hemos visto que las consecuencias
positivas (reforzamiento) del comportamiento facilitan su aprendizaje. Este
reforzamiento puede ocurrir en múltiples formas y, muchas veces, sin que seamos
conscientes de ello. Tal es el caso cuando el alumno no presenta la tarea en el
día requerido y al profesor se le olvida recogerla o bien, habiéndose recogido
dicho trabajo, el profesor no hace nada con el alumno que no la presentó. En
esta situación el no hacer la tarea no tiene una consecuencia específica por
parte del profesor. Así, la próxima vez que ese profesor pida una tarea, es
posible que el alumno no la Julio Varela Psicología Educativa Versión
electrónica ofrecida por el Grupo Contextos www.conducta.org 64 vuelva a hacer
ya que posiblemente vuelva a ocurrir lo mismo que la ocasión anterior. Como
podemos ver, las consecuencias pueden facilitar que un comportamiento vuelva a
ocurrir aun cuando éste sea incorrecto. Difícilmente podríamos creer que el
profesor lo hace intencionalmente, es más probable que no conozca algunos
principios básicos de la forma en la cual un comportamiento cualquiera puede
ser aprendido o bien, conociendo tales principios, no los aplique en
situaciones concretas como la que se describe.
Así, la primer regla general para
proceder a corregir un comportamiento inadecuado es:
Ante un comportamiento inadecuado
se debe proceder a presentar una consecuencia que no sea positiva para quien se
comporta incorrectamente.
La Psicología conductual
Actualmente en las escuelas de
los estados del país ya no es extraño encontrar psicólogos. En el inicio de los
70 del siglo pasado, este tipo de profesionistas era sumamente inusual. La
concepción tradicional del psicólogo tenía que ver con el "tratamiento de
personas con alguna enfermedad mental". Así, el hecho de que una escuela
contara con un psicólogo, llevó a creer a muchas personas que esa escuela se
dedicaba a la educación de niños con graves problemas. Esta imagen en cierta
forma se ha modificado. Hoy en día, aun cuando el psicólogo no sea ya un
profesionista extraño para la sociedad mexicana, creemos que el concepto que
muchas personas tienen respecto a la Psicología ha variado muy ligeramente en
todos estos años.
¿Psicología? ¿Y eso para qué se
estudia si se aprende en la vida diaria?
¿No es cierto que la Psicología
es algo como tener sentido común?
¿Psicólogo para qué, si mis hijos
no están locos?
Estas son algunas de las
expresiones comunes y que denotan un profundo desconocimiento de lo que en
realidad es la Psicología. La Psicología es una ciencia joven y como tal, tiene
las carencias por las que han atravesado todas las ciencias que actualmente
gozan de gran prestigio, dado el nivel de conocimiento con el que cuentan. Esta
juventud es notoria en muchas formas, la principal de ellas es que no existe
una definición unificada respecto a qué es la Psicología y de ahí que se cuente
con varias teorías alternativas. A estos diferentes sistemas o teorías también se
conoce como "escuelas". Algunas de las más conocidas son el
Estructuralismo (Wilhelm Wundt, Edward Titchener), Cognoscitivismo (Albert
Bandura, Ellis), Gestaltismo (Kohler), Funcionalismo (William James, John
Dewey), Conductismo (B. Frederick Skinner) e Interconductismo (Jacob Kantor).
En particular nos interesa el conductismo y el interconductismo ya que éstas
proporcionan el sustento teórico a las concepciones respecto al comportamiento
humano que se vierten en esta obra. El conductismo define a la Psicología como
la ciencia que estudia el comportamiento y el interconductismo como la ciencia
que estudia la interrelación entre el comportamiento y el medio. Para lograr
esto, se sigue un método que le es específico. El conductismo tiene como base
los trabajos e ideas de Ivan Pavlov, John Watson y Frederick Skinner. El
interconductismo por su lado sigue los lineamientos básicamente de Aristóteles
y Jacob Kantor, entre muchos otros personajes cuya lista pormenorizada escapa a
este escrito. La asociación con los trabajos de Pavlov, cuyos experimentos con
perros son famosos, provocó un choque de esta escuela conductista con las ideas
propias del Estructuralismo Europeo (Wilhelm Wundt) y el Funcionalismo
Americano (William James) en los inicios del siglo pasado, produciéndose muchas
críticas. Actualmente, puesto que el mayor número de psicólogos conductistas
radica en Estados Unidos, existe un rechazo ideológico a priori por parte de
aquellos que ven la sombra del imperialismo capitalista, en todo lo que se
realiza y produce en ese sistema.
BIBLIOGRAFÍA
Varela J. (2004). Consideraciones y estudio de la educación extracurricular basada en los modos lingüísticos. En J. Irigoyen y M. Jiménez (Comp.). Análisis Funcional del Comportamiento y Educación. 35-74. Hermosillo: Universidad de Sonora. http://cideps.com/wp-content/uploads/2015/01/Psicologia-Educativa.pdf
Varela J. (2008). Aprender a leer: Programa para niños en edad preescolar. México: Ediciones de la Noche. Disponible en: http://www.conducta.org/ y http://autismoaba.org/
Comentarios
Publicar un comentario